SINOPSIS
Si la pareja ideal existiese, Jodi y
Todd serían un modelo del género. Tras más de veinte años juntos, viven en
Chicago en un amplio apartamento situado en la planta 27, con unas vistas
espectaculares al lago Michigan. Todd posee una pequeña empresa constructora y
Jodi, psicoterapeuta, puede permitirse trabajar unas horas al día recibiendo a
sus pacientes en casa. El resto del tiempo se dedica a sus clases de Pilates, a
cocinar platos exquisitos y a pasear a Freud, su adorado golden retriever. Sin
embargo, la idílica relación entre Jodi y Todd parece tener algún punto
vulnerable. Aunque ninguno de los dos sea consciente de ello, ciertos hechos
amenazan con estropear su apacible existencia. Y cuando por fin Jodi reconoce
que su vida se está yendo a pique, la sensación de haberlo perdido todo se
apodera de ella y un abismo de sombrías posibilidades se abre ante sus ojos.
COMENTARIO
No lo puedo evitar, me gusta el
“domestic noir”. Este tipo de novelas, donde se
narran las tribulaciones de matrimonios aparentemente felices, que en el fondo
se descubren como tóxicos, repletos de secretos familiares, infidelidades,
engaños, abusos y mentiras, consiguen atraparme totalmente. Me recuerdan a las
novelas de Patricia Highsmith, que leía hace muchos años con absoluta fidelidad, y que
trataban de esas relaciones complejas que constituyen un universo en sí mismas
y que pueden albergar una trama criminal.
Últimamente este sub-género se ha
puesto de moda, gracias sobre todo al éxito fulgurante de Perdida, de Gillian Flynn, y se están publicando títulos tan interesantes
como La chica del tren, que ha
estado varias semanas en la lista de libros más vendidos de este verano.
El argumento es bastante sencillo. La
psicoterapeuta Jodi Brett y el constructor Todd Gilbert llevan veinte años de
vida en pareja con un estilo de vida envidiable, pero su estabilidad será
puesta a prueba cuando Todd se entera de que Natasha, su joven amante, hija de
su mejor amigo, va a tener un hijo suyo. Entonces Todd tendrá que tomar la
decisión de abandonar su perfecta y cómoda vida por una apasionada nueva
relación con una mujer mucho más joven.
Ambos miembros de la pareja son
fruto de infancias difíciles y han conseguido salir adelante en la vida a pesar
de acarrear traumas ocultos, sucesos del pasado que van perfilando su vida y su
manera de hacer frente a la realidad.
El título original de la novela es The silent wife, porque Jodi es una
mujer silenciosa, acogedora y agradable, nada controladora, que no hace escenas
ni intenta cambiar a su pareja, una mujer a la que no le gusta quejarse ni
reprender, y que disfruta creando un entorno agradable para su hogar. Sabe, por
sus estudios de terapias cognitivas, que las personas no están con nosotros
para cumplir nuestras expectativas ni nos tratarán bien siempre, y que el hecho
de no aceptar esto genera rabia y resentimiento. La serenidad se consigue
aceptando a las personas como son y enfatizando lo positivo. Sabe que la gente
no cambia, lo que quiere decir que no mejoran, sino que lo más seguro es que
empeoren. Porque, como bien sabe Jodi, lo importante no es lo que te sucede,
sino cómo reaccionas ante ello. Sin embargo, a pesar de todos sus esfuerzos por
ser razonable y mentalmente sana, cuando comprueba que su vida se desmorona ve
emerger, desde su interior, una persona diferente, capaz de cualquier cosa por
acabar con lo que amenaza su felicidad.
Este realismo oscuro puede llegar a
ser fascinante desde el punto de vista literario, y de ahí el éxito de esta
novela en muy poco tiempo.
La novela, narrada en tercera
persona, pero desde un punto de vista subjetivo, alterna los capítulos
dedicados a “ella” y a “él”, intentando acercar la personalidad y el estado de
ánimo del personaje al lector. La autora se toma su tiempo para contarnos, de forma metódica, cómo se ha llegado a esta
situación. Nos sumerge en las interioridades y los oscuros recovecos de la
desintegración de un matrimonio, los silencios, los engaños, las dudas y los
actos rutinarios que van lastrando la vida en común.
En el caso de los capítulos
dedicados a Jodi, la autora hace hincapié en la atención a sus pacientes,
incidiendo en sus problemas psicológicos y en las terapias destinadas a mejorar
sus trastornos.
A modo de moraleja, como en un
destello premonitorio, la autora parece decirnos que hay que vivir cada
instante de la vida, sin desperdiciarla por sentimientos negativos que lastran
la existencia y la bloquean, y de cómo, al aferrarnos a los bienes materiales
que consideramos un derecho adquirido, podemos llegar en ocasiones a actuar de
forma totalmente arbitraria y mezquina. Sucede sobre todo en los divorcios, cuando
personas que se querían y cuidaban una
de la otra se convierten en enemigos irreconciliables capaces de cualquier cosa
para hacer daño al otro.
Tengo que decir que quien busque un
thriller dinámico no encontrará mucha acción en las páginas de este libro. Se
trata más bien de una novela reflexiva, intimista y de análisis psicológico de
personajes, pero que mantiene el suspense gracias a su realismo, a su prosa
elegante y a la inquietud que provoca.
En mi caso, lo he leído en dos días,
así que puedo decir que me ha atrapado con sus consideraciones y explicaciones
de índole psicológico, sus teorías acerca de las terapias indicadas en los
trastornos psiquiátricos, y sus interesante explicaciones de las escuelas de
pensamiento de Freud y Jung y, sobre todo, de Alfred Adler, el preferido de
Jodi, con sus tres tareas vitales, cuya satisfacción es el distintivo de la
salud mental: la profesión, la amistad y el amor.
Por último, comentar que habrá
película basada en la novela, y que estará producida y protagonizada por Nicole
Kidman.
AUTORA
La canadiense A. S. A. Harrison,
autora de cuatro obras de no ficción, debutó en el género de la novela con La mujer de un solo hombre, que se
convirtió en un gran éxito internacional. Aclamada por el público y la crítica
como uno de los mejores thrillers psicológicos de los últimos años, fue todo un
fenómeno de ventas el año pasado en Estados Unidos, hasta convertirse en uno de
los éxitos del verano y sumar más de un millón de ejemplares vendidos en países
de habla inglesa. Se ha traducido a veintinueve idiomas. Lamentablemente,
A.S.A. Harrison, que vivía en Toronto con su marido, el artista plástico John Massey,
falleció de cáncer en 2013, a la edad de 65 años, poco tiempo antes de la
publicación de su primera novela, por lo que no llegó a conocer el éxito.
FICHA
TÉCNICA
Editorial: Salamandra (2014)
317 Páginas
ISBN: 9788416237029
Título original: The silent wife
Traducción: Gemma Rovira
Precio: 18 €
Ebook: 9,99 €
Puntuación :
No me importaría leerla, este tipo de libros me suelen gustar y tiene buena pinta
ResponderEliminarBesos
Me suelen gustar también este tipo de libros así que me lo anoto, que tiene buena pinta.
ResponderEliminarBesotes!!!
Yo me esperaba mucho más de ella. Al final fue una lectura pelín decepcionante.
ResponderEliminarBesos.
Este es de los que me gustan! =)
ResponderEliminarBesotes
es verdad que a veces este tipo de libros no tiene el ritmo que se espera, y eso me hace dudar, pero en principio tomo nota. Un beso!
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