SINOPSIS
Esta es la historia de varias
mujeres y de algún hombre. Mujeres valientes y sensibles, mujeres apasionadas,
mujeres que aman a los hombres pero que, por encima de todo, aman la música. Esta
es la historia de un violín que pasa de mano en mano, de un director de
orquesta exiliado que vive entre notas musicales y faldas, de madres ausentes,
de desamores y venganzas, de guerras que separan, de criadas que toman
chocolate caliente... Esta es la historia de La casa del silencio, donde la
música jamás deja de sonar.
COMENTARIO
Según empecé a leer esta novela fui
consciente de que me había equivocado al elegir el libro con el que estrenarme
con esta autora, porque no soy muy aficionada a la música clásica, y ésta es
una historia basada en las experiencias musicales y en las sensaciones que
provoca tocar un instrumento musical, por lo que me ha costado entender esa
pasión que sólo puedo imaginar. Por ejemplo, no conozco el “Concierto para dos
violines”, de Bach, que es un punto fundamental de la novela.
Estamos ante una novela intimista,
coral, que da voz en primera persona a
varios personajes, tres mujeres y un hombre, que, capítulo a capítulo, nos van
contando su vida, su experiencia con la música que es no sólo su oficio sino
también su razón de vivir. De fondo subyacen varias historias de amor que
cambiarán la vida de los protagonistas.
Todo gira alrededor de la música, en
concreto de un violín del siglo XVIII que es encontrado en un vertedero y que irá pasando de mano en mano, siendo
testigo de amores, desamores, rencores, soledades y venganzas. Es como un nexo
de unión en la vida de los diversos personajes que protagonizan esta novela.
Ellos nos van desgranando estos cuatro puntos de vista diferentes que van girando alrededor de la figura de Karl, el director
de orquesta exiliado, al que sólo conocemos por lo que el resto de personajes
cuentan de él. Es el único que no tiene voz en esta historia, hasta el final,
en el que una carta nos revela sus auténticos sentimientos. Karl, que es el eje
de la historia, Karl, que vive para la música y que ama a todas las mujeres a
las que dirige, es quizás el menos complicado de todos.
Los personajes están tratados con
mucho cariño, incluso los que menos simpatía inspiran. Todos son personas que
han sufrido pérdidas, desengaños, abandonos, y a los que la música les ha
supuesto un motivo para seguir viviendo y para relacionarse con el mundo que
les rodea. Y es que los músicos viven la vida de una forma diferente, que sólo
puede entender alguien que también ame la música de la misma forma.
Aunque me ha gustado la historia que
cuenta, lo cierto es que en mi opinión le ha faltado un poco de dinamismo y acción.
No me importa que una novela sea lenta, introspectiva y basada en sentimientos,
pero hay algunos momentos en que he echado en falta que ocurrieran más cosas y,
sobre todo, que hubiera más diálogos entre los personajes.
Por lo demás, me parece que la
autora tiene un estilo muy personal, escribe bien y con mucha sensibilidad.
Aunque al principio me ha costado conectar con las experiencias de los protagonistas, en general he disfrutado con la lectura.
Tendré que leer pronto alguna otra
novela de esta autora que trate otros temas porque seguro que consigo que la
historia me llegue más.
AUTORA
Blanca Busquets i Oliu nació en
Barcelona en 1961. Es periodista y
trabaja desde 1986 en las emisoras de Catalunya Ràdio donde ha realizado
diversos programas como El Club de la Bona Lletra y Lletres d'Or. También ha
trabajado de redactora en la Televisió de Catalunya durante siete años. Escribe
para Nació Digital y Osona.com. En 2011 recibió el prestigioso Premi Llibreter.
Entre sus novelas se encuentran A saber dónde está el cielo, La nevada del cuco, La casa
del silencio, El jersey, Tren a Puigcerdá.
FICHA
TÉCNICA
Editorial: Grijalbo (2013)
240 Páginas
ISBN: 9788425348204
Precio: 17,90 €
Ebook: 11,99 €
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